Padre e Hijo by Beily
Summary: Pre-serie, Mi versión de como Tony y Gibbs se conocieron. ¿Qué pasaría si Shannon y Gibbs hubieran tenido un hijo pequeño después de Kelly? ¿Y si ese hijo no murió como Gibbs pensaba?
Categories: Gen, Non-English Characters: Vivian Blackadder, Tom Morrow, Leroy Jethro Gibbs, Donald Mallard, Anthony DiNozzo
Genre: Alternate Universe
Pairing: None
Warnings: None
Challenges:
Series: None
Chapters: 4 Completed: No Word count: 4810 Read: 11132 Published: 08/18/2011 Updated: 08/19/2011
Story Notes:
SOY EL AUTOR REAL DE ESTA HISTORIA, Blue_Angel (mi prima) La publicó aquí sin mi permiso. Espero que difruten del capítulo y gracias a los dos comentarios que recibió. Pueden encontrar más de mis historias en mi Blog. ¡Disfuten! Beily ^^

1. Padre e Hijo by Beily

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Padre e Hijo by Beily
Author's Notes:
Pre-serie, Mi versión de como Tony y Gibbs se conocieron. ¿Qué pasaría si Shannon y Gibbs hubieran tenido un hijo pequeño después de Kelly? ¿Y si ese hijo no murió como Gibbs pensaba?
Capítulo 1.
-¡Más alto papi!, ¡Más alto!- gritó una pequeña voz con alegría y el joven sargento Jethro Gibbs miró con orgullo a la fuente proveniente de la voz, era una pequeña niña, la niña de sus ojos, su hija, su princesa, se columpiaba dulcemente meciendo su larga cabellera con el viento y sus ojos, grandes y azules brillaban con alegría.
El cielo era azul, el sol brillaba y los pájaros cantaban...Shannon jugaba con el pequeño AJ y Kelly se columpiaba feliz en su columpio, el día era perfecto y nada ni nadie podía interrumpir la oportunidad de volver a pasar un día con su familia...
~Ring, ring, ring~
-¡NO! ¡Shannon!¡Kelly!¡AJ!¡Volved!- Gritó con angustia el ex-marine al ser despertado por el estridente sonido del teléfono móvil, con un suspiro Jethro Gibbs recogió el móvil y contentó a la llamada. -Sí, Gibbs- Fue su habitual modo saludo.
-Jefe...siento mucho haberte despertado-sonó una voz al otro lado del extremo de la línea telefónica
-Sí...¿Qué tienes Burley?-Preguntó el ex-marine borrando el sueño de sus ojos.
-Han encontrado el cuerpo de un marine en el puerto de Baltimore, Jefe-Explicó Burley.
-Bien...voy para allá-Contestó el más viejo, poniendo fin a la llamada telefónica y poniéndose en marcha para comenzar un nuevo día...otro más..
-¡Ah, no! No pienso dejar que toquen este cuerpo-Gruñó una voz cuando el Agente Gibbs llegó a la escena del crimen, café en mano.
-Pero...la víctima era un almirante de la Marina...-Decía la voz de Stan Burley.
-Me da igual...la víctima y la escena del crimen se hayan en la ciudad de Baltimore...osea que es de la jurisdicción del Departamento de Policía de Baltimore- Sonó de nuevo la voz desconocida, -Y ¡fíjate que casualidad! Yo soy de ese departamento- continuó diciendo con la ironía presente esa voz.
El agente de pelo plata se acercó a su otro agente, -¿Qué está pasando?- Gruñó en su habitual tono marine.
-Ese idiota del Departamento de Baltimore, no nos deja tocar el cadáver.-Respondió lacónicamente el agente especial Vivian Blackader.
Jethro tomó su último sorbo de café y se dirigió hasta donde su agente discutía con el detective de Baltimore.
-Jefe...el detective DiNozzo...uh...no deja que procesemos la escena...-explicó con nerviosismo Burley. Jethro gruñó dispuesto a dar tres o cuatro voces al detective, pero antes de que pudiera reaccionar, la voz del detective de hizo eco entre los tres agentes.
-Mire...no sé quien es...y la verdad tampoco me interesa saberlo...el cadáver está en el puerto de Baltimore, así que es de mi jurisdicción y nada de lo que diga puede hacerme cambiar de opinión- dijo mirando fijamente a los ojos azul hielo del agente del NCIS.
Gibbs miró al joven fijamente a los ojos, eran unos ojos verdes que les recordaba vagamente familiar...el chico era valiente, nadie en todos sus años en el NCIS, había sido capaz de hablarle como él le había hablado..¡maldita sea! le gustaba ese chico, tenía agallas. Finalmente tras una larga pausa Gibbs habló, -Bien...investigación conjunta el NCIS y el Departamento de Baltimore, trabajaremos juntos- dijo el agente de pelo plata mirando de nuevo a los ojos verdes tan familiares del detective. El chico era un alto y delgado joven...no más de treinta años, diría Gibbs, tenía el pelo castaño claro...señal de haber sido rubio en el pasado, y esos familiares ojos verdes. El ex-marine siguió mirando al joven sintiendo una punzada de tristeza en su pecho, la familiaridad de este chico era tan alta, con su pequeño hijo...este chico era todo lo que Aj hubiera sido si no hubiera muerto tan prematuramente.
-Bien...pero que quede claro agente...-comenzó a decir el joven detective
-Gibbs...Jethro Gibbs- respondió el agente de pelo plata tendiendo la mano al joven. El detective la miró pero no la estrechó en lugar de eso siguió diciendo lo que empezó a decir...- Agente Gibbs...que quede claro...aún que la investigación sea conjunta no obedeceré ordenes suyas....¿vale?-Preguntó el joven. El agente del NCIS, asintió, con una parte de él sintiendo orgullo por el chico.
-Creemos que su almirante estaba metido en un trapicheo con el Rata...un importante traficante de la zona...ustedes pueden investigar la muerte de su almirante y nosotros seguiremos el rastro del Rata...ah...y lo siento olvidé presentarme soy el detective Anthony DiNozzo y él es mi compañero Daniel Murray- comentó el joven detective al anciano. Jethro lo miró sorprendido por el nombre del joven, Anthony al igual que su hijo Anthony Jethro, Shannon y él habían elegido ese nombre en honor al hermano de Shannon , el único que había tenído, Anthony había muerto y Shannon quiso honrarlo llamando a su primer hijo varón así. Toda esta situación era tan...ni siquiera tenía palabras para definirla...la mayoría de la gente pensaría que era una mera casualidad....pero Jethro Gibbs no era del tipo de hombres que creen en las coincidencias.
-Jefe...¿Estás bien?-Preguntó Burley con algo de preocupación, el agente más anciano se había perdido en sus pensamientos...era un estado de ánimo de Gibbs que nunca había visto...y eso que conocía todos. Jethro asintió con la cabeza, -Bien...hora de trabajar- dijo aún envuelto en sus pensamientos.
Algo no encajaba aquí...y Leroy Jethro Gibbs no descansaría hasta averiguar el que...
End Notes:
SOY EL AUTOR REAL DE ESTA HISTORIA, Blue_Angel (mi prima) La publicó aquí sin mi permiso. Espero que difruten del capítulo y gracias a los dos comentarios que recibió. Pueden encontrar más de mis historias en mi Blog. ¡Disfuten! Beily ^^
2. by Beily
Capítulo 2.
Notas, alegrías melodiosas que flotaban alegremente por la casa, llenándola de musicalidad y la alegría que sólo su hija conseguía dar a través del piano situado en un rincón de la sala... magia ascendente y descendente que bailaba en sus oídos angelical voz mezclada entre dulce melodías. Kelly había demostrado ser una gran pianista desde una temprana edad, la niña tenía talento...
La dulce melodía se detuvo súbitamente , trayendo tras de sí un fuerte grito que se convirtió en llanto, Jethro corrió hacia el salón para encontrar a su pequeño niño sentado en el suelo, al lado del piano llorando desconsoladamente... El joven marine se acercó a su hijo abrasándolo fuertemente, intentando consolar el llanto del pequeño niño de ojos verdes. Tras unos segundos de llanto una dulce melodía se hizo eco llenando la casa de armonía nuevamente, cesando el llanto del niño, levantando la vista hacia el piano Jethro sonrió a su bella esposa que entonaba con su angelical voz una dulce canción...."Close your eyes...have not fear the monster gone...he's on the run and your daddy's here..." la bella pelirroja miró a su marido que sostenía entre sus brazos a su pequeño hijo dormido... "beautiful, beautiful, beautiful boy.... "
Leroy Jethro Gibbs volvió a la realidad con el sonido de un piano, la esperanza volvió a iluminar su corazón pensando en que su pequeña hija estará en el piano, tocando cual melodiosa melodía. Jethro miró a su alrededor frunciendo el ceño a la extraña habitación, de pronto recordó...era la habitación que había estado utilizando durante las tres últimas noches, desde aquel día en el que uno de sus casos le había cruzado con aquel joven detective de Baltimore. Las habitaciones del único hotel en una milla de 200 Km, estaban ocupadas, así que DiNozzo le había ofrecido su habitación de invitados y ahí estaba él...sentado en la cama de la habitación de invitados de DiNozzo bañado en sudor y escuchando la dulce melodía que Shannon solía tocar. El ex-marine se levantó de la cama y fue hasta la fuente del sonido, en el salón en un rincón junto a un ventanal, había un piano de cola negro, a juego con los sofás de cuero de DiNozzo.
Al escuchar el sonido de pasos el joven detective salió disparado del banco del piano en el que estaba sentado, pistola en mano, apuntando rápidamente al extraño...al darse cuenta de que se trataba del agente del NCIS, Tony bajó su arma y suspiró...-Siento mucho haberte despertado, Gibbs- dijo el joven volviendo a ocupar su asiento en el piano. En lugar de decir nada, Gibbs sólo miró al joven que volvió a tocar las notas de tan familiar canción... -"Close your eyes...have not fear...the monster gone, he's on the run...and your daddy's here...beautiful, beautiful, beautiful boy..."-Cantó Gibbs al compás de la canción. Tony paró de tocar la canción y miró a Jethro con los familiares ojos verdes...
-No quería molestarte...- Dijo el ex-marine a modo de disculpa. El joven negó con la cabeza -No...no molestabas...-Dijo bajando la mirada hacia el piano.
-Es una bonita canción de John Lennon...-Dijo Gibbs acercándose a él. Tony asintió
-Mi madre solía tocarla para mí..cuando era pequeño...-Dijo el joven sonriendo tristemente a Gibbs.
-No te hacía por un pianista, DiNozzo- ambos sonrieron a la frase que salió de la boca de Gibbs.
-Mi madre...me obligó a aprender- dijo el joven encogiéndose de hombros. Gibbs no dijo nada, sólo miró al joven que se había perdido en sus pensamientos. -...claro que para mi padre era un honor tener un hijo pianista que un hijo futbolista-terminó de explicar el joven volviéndose a tocar el piano...una maravillosa canción que creía haber olvidado...
"Imagine all people...living life in peace...ah...ah"-Cantó la joven pelirroja, bailando al son de la maravillosa canción que llenaba cada rincón del amplio gimnasio del Stillwater High School. El joven Jethro sonrió a su acompañante.
-Vamos Leroy, baila conmigo- Dijo Shannon sonriendo, se veía radiante y muy feliz.
Algo en el pecho del joven Leroy se llenó de tristeza, al pensar que en acabar esta mágica noche debía abandonarla. Shannon se abrazó a él, bailando al son de la lenta canción. -Te echaré de menos, Leroy-Sollozó la joven en su pecho.
-Hay, no llores...serán sólo seis meses, Shan- dijo el joven abrazando aún más fuerte a su joven novia
-¿Y...sí?-Preguntó la joven.
-Shh...y si nada...solo disfruta de esta noche, Shan-Dijo el joven abrazando y besando a Shannon. Y así lo hicieron, disfrutando de la que sería su canción...
-¿Gibbs? ¿Está bien?- Preguntó Tony con algo de preocupación. -Sí...es sólo...recordé algo al escuchar esa melodía...- dijo teniendo un vistazo a la luz del rostro del joven detective, se veía cansado, con grandes ojeras que colgaba de sus ojos, el caso estaba siendo agotador para todos...pero por lo que se ve, para Tony lo estaba siendo aún más. Por primera vez en mucho tiempo, se había despertado en Gibbs algo, que creía muerto, su instinto paternal...
-Vamos DiNozzo..vamos a la cama...que mañana nos espera un gran día de trabajo.-Dijo el anciano levantándose del asiento que había estado ocupando justo al lado del joven. Tony, quien ya tenía los parpados a media asta asintió y fue a la cama con ayuda de Gibbs.
-Buenas noches, DiNozzo-dijo el agente del NCIS apagando la luz de la habitación.
La única respuesta que recibió a cambio fue el sonido de la suave respiración de Tony.
-"Duermete niño, duermete ya...que viene el coco y te comerá..."-Cantó dulcemente Jethro Gibbs, sentado en la mecedora de al lado de la ventana de la habitación de su pequeño niño. Abrazó con un poco más de fuerza el pequeño cuerpo del niño y sonrió.
Se levantó unos minutos después y acostó a su hijo en la cama, besó dulcemente su frente y apagó la luz.
-Buenas noches, AJ-susurró saliendo
-Buenas noches...papi...-Respondió una adormilada voz.
____________________________________________
End Notes:
Y aquí el segundo capítulo. Realmente espero un comentario o algo, ya se sabe que los autores no somos nada, sin comentarios ;) Gracias, a los que leéis, y comentáis! ;)
3. by Beily
Capítulo 3.
El tintineo de sartenes y el delicioso aroma que frotaba junto al aire, fue lo primero que registró Tony al despertar, con un suspiro, se levantó de la cama y fue a la cocina, donde encontró a Gibbs, al lado de la vitrocerámica, vertiendo un poco de masa para tortitas en la sartén, -Buenos días, DiNozzo- saludó el hombre de pelo plata... -Buenos días, Gibbs- saludó Tony sorprendido, al plato de tortitas que Gibbs puso delante de él, sobre la mesa.
-¿De dónde...?- comenzó a preguntar sólo para ser cortado por la voz de Gibbs.
-Fui a comprarlos hace un rato...tu despensa da depresión- dijo riendo entre dientes Gibbs.
Tony se ruborizó - Bueno...ya sabes que...suelo comer comida rápida en el trabajo- dijo el joven agachando la cabeza, -Yo...uh..te pagaré por esto, Gibbs...- continuó diciendo sólo para volver a ser cortado por la voz de Gibbs.
-Es sólo un paquete de harina y unos huevos...es lo menos que puedo hacer...por dejarme dormir en tu casa- dijo el viejo tomando un sorbo de su café. Tony asintió y se dio cuenta de un paquete envuelto en un desaliñado papel marrón de embalage, fue hacia donde estaba el paquete y lo miró con el ceño fruncido.
-El cartero lo trajo esta mañana temprano- Explicó Gibbs.
Tony cogió el paquete y lo abrió, dentro estaba lo que se había convertido en su habitual regalo de cumpleaños, una lijadora eléctrica y la tradicional nota que decía; "Feliz cumpleaños. Atentamente Elisabeth Smith, asistente del Sr. DiNozzo" Con un suspiro, dejó el paquete donde estaba y se excusó para salir de la cocina.
Gibbs miró con preocupación al joven...no entendía porque...pero este chico había puesto en alerta su instinto paternal, soltó la taza del café y fue a mirar dentro del paquete..."Feliz cumpleaños..."medio leyó la nota, levantó la vista buscando un calendario, encontró uno pequeño en la puerta del frigorífico... Sábado 8 de Julio del 2000...
Gibbs se golpeó la cabeza mentalmente por no recordar este día...
Mejillas regordetas, piel sonrosada, cabello rubio y unos grandes ojos verdes. El pecho del joven Jethro se hinchó con orgullo al mirar a su pequeño niño, que tan sólo tenía unas horas de vida.
Sonrio a su esposa, quien lo miraba con una gran sonrisa en sus labios...
-Lo hemos conseguido, Jethro- susurró Shannon no queriendo molestar al pequeño, que actualmente dormía en los brazos de su padre.
-Sí...lo hemos conseguido, ¿verdad, AJ?-Preguntó Jethro sonriendo con orgullo al pequeño niño en sus brazos.
-¿AJ?-Preguntó con asombro Shannon. Jethro apartó la vista de su hijo y miró a los hermosos ojos verdes de Shannon.
-Anthony Jethro...-Dijo el joven mirando al niño que se limitó a sonreirle a su padre.
-Oh, Jethro...es un bonito nombre-dijo la joven Shannon con la voz llena de emoción y con grandes lágrimas de felicidad que se derramaban de sus ojos...
-Lo sé...- se limitó a decir con una gran sonrísa, Shannon besó dulcemente a su marido quien se había sentado en la cama junto a ella unos minutos antes.
-Te quiero, Jethro- susurró la joven no queriendo molestar al pequeño niño que dormía en los brazos de su marido.
Ambos padres sonrieron mirando al pequeño ser que había nacido fruto de su amor...
Su pequeño...su esperanza...su futuro en común...
Jethro volvió a mirar el paquete con una mezcla de rabia e ira barriendo su cuerpo.. ¿En serio ese tío le había regalado una lijadora eléctrica? Salta a la legua que DiNozzo no es del tipo de hombre que trabaje la madera...era más bien el tipo de hombre al que le gustaba la música o el cine...prueba de ello era el piano situado junto al gran ventanal...o la gran estantería repletas de DVDs situada al lado del televisor.
¿Cómo la persona que te ha dado la vida no puede conocer eso? Pensó con algo de enojo. Sí el tuviera la oportunidad de volver a tener una familia, regalaría a Kelly ese cachorro que tanto quería...o ese camión de bomberos que AJ quería para su última navidad...Gibbs despejó los pensamientos sobre sus niños y volvió a la realidad con el sonido de la puerta principal cerrándose. Tony se había ido, dolido por su maldito regalo... el instinto paternal de Gibbs se puso a mil...tenía que hacer algo para alegrar el que se suponía que es el mejor día del año en la vida de todo el mundo...cogió sus cosas y se fue cerrando la puerta tras de sí...
Una hora después de haber salido por la puerta, Tony llegó al edificio, donde se situaba su apartamento, derrotado consigo mismo...había decidido ir a gritarlegritarle por ese amor que nunca le dio...por todo el dolor que le había causado...gritarle por todo, pero...no pudo hacerlo, nadie se enfrentaba a Anthony DiNozzo Sr, sin después pasar una larga temporada en el hospital...o en el cementerio... así que Tony había vuelto a su apartamento. El joven se acercó al buzón y lo abrió sorprendido al encontrar un pequeño paquete-parecido a una carcasa de DVD- envuelto en papel de regalo azul-su color favorito- y una nota adjuntada a él...
"Feliz cumpleaños, DiNozzo. Espero que te guste el regalo...he visto que te gusta las películas...y que te faltaba una de James Bond...así que he decidido regalártela...Debo volver a DC, Burley me mantendrá informado sobre el caso, mira tus seis... Gibbs"
Tony sonrió al leer la nota, y acarició la carcasa del DVD, le encantaba James Bond...como a su padre-su verdadero padre- volviendo a sonreír, Tony se fue...necesitaba darle las gracias a Gibbs...
Gibbs llegó al DC en muy poco tiempo - no es de extrañar con su forma de conducción- tenía una apretada agenda a su llegada...pero nada de eso le importaba, lo primero era lo primero...había pasado por una floristería y había comprado tres preciosos ramos de flores, uno de rosas para Shannon y dos de claveles blancos para Kelly y AJ... también había hecho una parada en la antigua juguetería donde vendían el camión de bomberos que tanto quería AJ, con una sonrisa triste Gibbs compró el camión y un perro de peluche para Kelly y realizó su camino hacia donde descansaba su familia...cuando llegó...nunca hubiera imaginado encontrar a la persona que había encontrado a los pies de las tres tumbas...
No puede ser...
End Notes:
Gracias a todos los que leéis, en este momento estoy trabajando en el cuarto capítulo.
4. by Beily
Capítulo 4.
No puede ser...
Jethro aún miraba petrificado a la persona que se encontraba ante las tumbas de su familia, en todos estos años, no había cambiado nada...sólo había adquirido alguna que otra arruga, signo claro de todo el tiempo pasado, su cabello seguía manteniendo ese color rubio brillante, y sus ojos seguían siendo tan verdes e intensos como los de Shannon...
Nunca había imaginado ver a esa persona allí de pie delante de las tres lápidas en mármol pulido y brillante, y sin embargo, allí estaba Joanne Feelding...su suegra...la madre de Shannon...la abuela de Kelly y AJ...
"...Nunca entendí que es lo que te enamoró de él...no te discuto, que es un hombre guapo y cariñoso...me alegré al saber que estabais juntos...que habíais formado una familia...pero era un marine, maldita sea... él es el culpable de todo esto...si no os hubiera llevado a ti y a Kelly de Stillwater...ahora tú...habrías tenido la oportunidad de envejecer...y los niños, la oportunidad de ser unos adultos buenos...la oportunidad de formar una familia...siempre me he preguntado como hubieran sido de mayores..."
Oía Jethro a Joanne decir mirando a la tumba de Shannon...el agente del NCIS, pensó en la pregunta planteada por la anciana...al igual que ella, Jethro siempre había pensado en como serían sus hijos como adultos... siempre había imaginado a Kelly como una alta y guapa joven de ojos azules a la que pretenderían todos los jóvenes de la ciudad, a una joven e inteligente veterinaria...
Siempre había imaginado a AJ, como un joven alto y guapo de ojos verdes y radiante sonrisa...un joven marine. Jethro sonrío ante el recuerdo de la primera vez que su hijo le dijo a lo que quería dedicarse de mayor...
Había sido seis largos meses, en los que el joven Jethro había visto miles y miles de balas....destrucción, dolor...había sido una larga guerra...cada día que pasaba una parte de él moría lentamente al dejar atrás todo cuanto tenía y quería, su familia...
Sin embargo, ahora, cuando ya llegaba a casa, sentía que nada de lo pasado en el campo de batalla importaba...sólo importaba una única cosa, volver a ver a su familia...
-¡Paaaaaaaaaapiiiiii!- gritó con alegría una pequeña voz
Jethro sonrío con cariño al propietario de la pequeña voz, quien se acercaba a él, corriendo hacía la puerta desde el salón.
-Hey, campeón me alegra volver a verte- dijo él revolviendo cariñosamente el pelo de su hijo. El joven se maravilló ante lo mucho que había cambiado su hijo en apenas seis meses, el niño había crecido mucho, era mucho más alto que la mayoría de los niños a los dos años de edad, sus ojos habían sido de un verde más intenso que la última vez que lo vio, y su cabellera, se había convertido en un brillante juego de rizos rubios. AJ, miró hacia él, mostrando sus pequeños dientes de leche en una enorme sonrisa.
-¡Papi! Te he echado de menos- dijo el niño abranzandose a su pierna. Jethro sonrío con dulzura a su pequeño niño y miró a Shannon que se acercaba a ellos desde el salón.
-¡Jethro!-gritó con alegría acercándose a abrazar a su marido. Jethro sonrío y abrazó fuertemente a Shannon.
-Te he extrañado mucho, Shan-dijo el joven con la voz amortiguada en el pelo de la joven pelirroja. Shannon no pudo evitar llorar de felicidad al ver a su joven marido de nuevo en casa, - Y yo a ti, Jay- dijo la joven mientras acariciaba el suave-y corto- pelo de su marido. AJ, miró a sus padres con curiosidad, mientras sonreía enseñando sus pequeños dientes de leche. -Hey- dijo Jethro sonriendo a su hijo. -¿Qué es lo que te hace tanta gracia?-preguntó el joven a su hijo mientras que se acercaba a este haciéndole cosquillas. El pequeño niño reía mientras intentaba escapar del monstruo de las cosquillas. -¡NADA!-Exclamó entre risas, siguieron así durante un rato más hasta que la pequeña voz de AJ, sonó en toda la habitación, -¿Sabes una cosa papi?-Preguntó mirando a los ojos a su padre, Jethro miró al niño con curiosidad, -¿Qué pasa, hijo?-preguntó mientras jugaba distraídamente con un pequeño coche del niño. El niño sonrio con orgullo a su padre, -Cuando sea mayor, voy a ser un ma-marine, como tú papá-dijo el mientras señalaba a su padre. Jethro sonrio con orgullo a su pequeño niño, que actualmente estaba jugando con unos soldaditos de plástico, que se habían convertido en su juguete favorito, desde que Jethro se lo había regalado antes de salir hacia la guerra. Revolvió el juego de rizos que el niño tenía por pelo y volvió a sonreír, -Serás el mejor Marine, de todo el cuerpo- dijo mientras cogió a su pequeño en sus brazos.
Jethro volvió a la realidad, al escuchar un ruído procedente de el lugar donde Joanne, estaba, junto a las tumbas de su familia, el ex-marine, vio a su ex-madre política dar un suave beso a cada una de las tumbas mientras intentaba borrar las lágrimas de sus ojos. Cuando la anciana se había ido, Jethro se acercó a las tres tumbas blancas, primero a la de su hijo, con rostro solemne, el anciano colocó el pequeño camión de bomberos ante el mármol blanco, -Feliz cumpleaños, hijo...- dijo mientras pasaba su dedo indice, sobre la brillante inscripción..."Anthony Jethro Gibbs, amado hijo...". En segundo lugar, el ex-marine fue a la tumba de su pequeña hija, colocó el pequeño peluche, -Te extraño, princesa- dijo mientras pasaba su dedo por la brillante inscripción..."Kelly Joanne Gibbs, amada hija... " Esta vez, con lágrimas en los ojos, el anciano se acercó hacia la tumba de su esposa, donde colocó un ramo de rosas rojas, -Lo siento, Shan- dijo mirando a la inscripción ante él, "Shannon Gibbs, amada hija, esposa y madre..." - El ex-marine no pudo contener las lágrimas que se deslizaban de sus ojos, colocando un suave beso en la lápida de su joven esposa, Jethro se marchó del lugar santo.
Tony por su parte se encontraba sentado justo delante de su pantalla de televisión, visionando tranquilamente la película que Gibbs le había regalado, el primer regalo-más allá de una lijadora eléctrica- que había tenido en años.Había algo en Gibbs que le gustaba, una parte de él deseaba, ser parte de su equipo, de su día a día...otra parte de él deseaba, volver a ser un niño, para poder tener en Gibbs, el padre que nunca tuvo. Apagando el televisor, a Tony se le ocurrió ir a agradecer al agente del NCIS, el regalo que le había hecho...hizo una mueca al recordar que no sabía nada sobre Gibbs, salvo que era agente especial del NCIS. Con un suspiro el joven cerró los ojos y se dejó vagar por miles de recuerdos...
Miedo y alivio, era todo cuanto podía sentir en este momento el pequeño Anthony DiNozzo, mientras esperaba pacientemente el tren que lo llevaría a la que hoy en adelante sería su nuevo hogar hasta la mayoría de edad, la escuela militar de Rhod Island. Con un suspiro tembloroso y evitando por todos los medios no llorar, el pequeño niño subió al tren y se sentó en el único sitio que quedaba libre, entre una señora de edad de aspecto agradable y un hombre de pelo oscuro y aspecto triste. El pequeño niño se limitó a mirar por la ventanilla del tren el deprimente paisaje que esta mostraba... intentando por todos los medios no llorar, "Los DiNozzo no lloran" era lo que siempre decía su padre justo después de darle una de sus azotainas... -A veces, está bien llorar, chico- habló una profunda voz masculina, Tony se estremeció ligeramente al escucharla, y miró a su lado, el hombre de pelo oscuro y aspecto triste le miraba solemnemente. El pequeño Anthony negó con la cabeza...-Los DiNozzo no lloran- susurró intentando que el extraño no lo oyera, pero fallando, -¿Por qué no?- Preguntó el hombre, Anthony no contestó en su lugar se quedó mirando fijamente al hombre.
-Me llamo Leroy, ¿Y tú?- Preguntó Leroy al chico.
- An-Anthony- Contestó el chico con timidez tras una larga pausa. Leroy miró al chico y sonrio, -Es un nombre demasiado largo para un niño como tú...-dijo suspirando. Anthony miró al hombre y le regaló una media sonrisa tímida -Mis amigos me llaman Tony, p-pero a padre no le gusta que acorten mi nombre...-contestó el pequeño evitando derramar las lágrimas que amenazaban con caer de sus ojos...dios, extrañaba a su padre...
-Ya te he dicho, que a veces está bien llorar...-Dijo el hombre de pelo oscuro, mientras apretaba su mano en el hombro del pequeño, en señar de consuelo. Anthony negó rotundamente con la cabeza...pero fallando miserablemente cuando sus ojos, se negaban a dejar caer las lágrimas, que finalmente cayeron.
Leroy abrazó al pequeño niño, permitiendo que este llorase en su hombro...
Tony abrió los ojos de pronto al recordar, esa memoria que llevaba enterrada en lo más profundo de su subconsciente. De pronto recordó, aquel hombre de pelo oscuro, el que había conocido en aquel tren, aquel día hacía tantos años, aquel hombre el que había ido a visitarlo tantas veces a la academia, aquel hombre al que había llegado a querer como padre, aquel hombre el que había dejado de visitarlo destrozando la poca confianza que le quedaba por los adultos, era el hombre que había conocido días atrás, Leroy Jethro Gibbs...
Gibbs suspiró mientras lijaba una de sus costillas de su preciada embarcación, había sido un día duro, hubiera sido el vigésimo-octavo cumpleaños, de su niño... le dolía el alma al pensar en todo cuanto había perdido por no haber protegido lo suficiente a su familia, perdió una mujer y dos hijos, perdió el poder observar como sus pequeños hijos hubieran cambiado de ser unos niños a unos maravillosos adultos, había perdido la oportunidad de tener una vejez junto a la que fue- y es- su único y amor verdadero....
Jethro suspiró intentando espantar esos pensamientos, maldita sea, siempre tenía control sobre sus pensamientos, pero todo cambió el día que conoció a aquel joven y misterioso detective, Anthony DiNozzo...el viejo dejó de lijar para servirse otra generosa cantidad de Bourbon...tendiéndose al lado de la embarcación, Jethro se permitió volver a tener todos aquellos pensamientos que desde hacían varios días lo atormentaban...
Oscuro...todo era oscuro, el verde campo de sus antiguos recuerdos,había sido nublado con un manto negro de desolación...todo se había destrozado, como su corazón... Jethro se sentía abrumado ante los miles de recuerdos que abrumaban su corazón, Shannon, su sonrísa, Kelly y AJ, sus risas...sus juegos, recuerdos felices.
Lo único que podía divisar entre el manto de oscuridad que cubría al que había sido un verde paisaje, era una figura solitaria, parada justo en el frente de lo que antes había sido un precioso lago, azul.
Jethro siempre se había enorgullecido de su capacidad para reconocer personas a cierta distancia...era capaz de conocer a una persona por su constitución física, o incluso por su forma de caminar. Pero en esta ocasión su capacidad de veía empañada por la negrura del lugar, su instinto le gritaba que había visto a esa persona, en algún lugar...pero, ¿Dónde?
Con cautela, Jethro decidió acercarse a la persona, alegrándose al encontrar más claridad con cada paso que daba, sorprendido, Jethro por fin pudo situar a la figura...
-¿DiNozzo?-Preguntó sorprendido el ex-marine al encontrar al joven detective en un paisaje tan desolador como este. El joven detective ni siquiera se movió al escuchar la voz del viejo ex-marine.
Jethro Gibbs no era un hombre de paciencia, ni siquiera en este caso, -¡DiNozzo!- volvió a repetir la voz del joven , sintiendo la falta de paciencia tan típica en él, recorriendo sus entrañas. Jethro decidió poner una mano en el hombro del joven para darle la vuelta para hacer frente a su cara.
De pronto el cuerpo alto y musculoso de DiNozzo, cedió dando lugar a un cuerpo de pequeño tamaño, el cuerpo de un niño, su niño...
-Papá...soy yo...¿por qué no te das cuenta?-Preguntó el pequeño niño acercándose más a él-Papá, soy AJ, mírame...-Continuó diciendo el niño.
Jethro sentía el mundo desmoronarse bajo sus pies...era un sueño...tendría que serlo...
End Notes:
Gracias por los comentarios, de verdad, me alegra mucho tener un comentario! :) Podéis encotrar más historias Padre-hijo en mi perfil, o simplemente visitar mi blog: http://beilyblack.blogspot.com Muchas Gracias, y aquí va el siguiente capítulo. Disfrutad! :)
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